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Comunicado de prensa

Procurador General De Ee.Uu. Anuncia Acuerdo Historico De Liquidacion De $13 Mil Millones Con Jpmorgan Por La Venta De Valores Respaldados Por Hipotecas Defectuosas

Para Divulgacion Inmediata
U.S. Attorney's Office, Eastern District of California

SACRAMENTO, California - El procurador general de los EE.UU., Eric Holder, el procurador general auxiliar Tony West y el procurador federal de los Estados Unidos Benjamin B. Wagner anunciaron que los Estados Unidos han llegado a un acuerdo de liquidación civil con JPMorgan Chase relacionado con la venta que hicieron JPMorgan y otros dos bancos que adquirió JPMorgan en el 2008, Bear Stearns y Washington Mutual, de valores respaldados por hipotecas residenciales.

El acuerdo resuelve las posibles reclamaciones de miles de millones de dólares por las sanciones civiles bajo la Ley de Reforma, Recuperación y Ejecución de Instituciones Financieras (FIRREA, por sus siglas en inglés), así como las reclamaciones por las compensaciones de pérdidas de la Agencia Federal de Crédito para la Vivienda (FHFA, por sus siglas en inglés), la Administración Nacional de Cooperativas de Crédito (NCUA, por sus siglas en inglés), la Corporación Federal de Seguros de Depósitos (FDIC, por sus siglas en inglés) y los estados de California, Nueva York, Illinois, Massachusetts y Delaware.  Este requiere que JPMorgan le pague $2 mil millones al Departamento de Justicia de los EE.UU., màs un total de $7 mil millones a las agencias estatales y federales, y provea una compensación adicional de $4 mil millones para los propietarios de viviendas y vecindarios afectados por la crisis financiera que comenzó en el año 2008.

El acuerdo de liquidación, que es de $2 mil millones de dólares, constituye la sanción civil màs grande que jamàs se le haya impuesto a algún banco por emitir valores respaldados por hipotecas defectuosas. Este es el resarcimiento màs grande de la historia de un caso en que haya trabajado la Procuraduría General de los EE.UU. para el Distrito Este de California.

El acuerdo de liquidación fue producto en parte de una investigación que hiciera el procurador auxiliar de los EE.UU. y los agentes especiales de la FHFA-OIG en el Distrito Este de California sobre las posibles violaciones de FIRREA en la titulación y venta de valores respaldados por hipotecas residenciales (RMBS, por sus siglas en inglés) por parte de JPMorgan como tal (no Bear Stearns ni Washington Mutual) entre los años 2005 y 2007. Luego de la investigación, el procurador federal Wagner concluyó que JPMorgan vendió miles de millones de dólares de RMBS con tasa no preferencial respaldados por grupos de préstamos hipotecarios que el banco sabía contenían préstamos que no cumplían con las guías de aseguramiento del tramitador del préstamo, estaban garantizados por propiedades con tasaciones infladas, estaban respaldados por índices incorrectos de préstamo-valor o deuda-ingresos o se originaron en violación a las leyes y regulaciones federales y estatales, a la vez que les dio información falsa a los inversionistas sobre la calidad de los préstamos en los grupos y el riesgo de pérdida.

En el proceso de adquisición de los grupos de préstamos hipotecarios de los tramitadores de préstamos, JPMorgan actuó con la “debida diligencia” al contratar empresas de aseguramiento externas para inspeccionar una muestra de los archivos de préstamos, generalmente entre 20 y 30 por ciento de los préstamos en un grupo. Estas empresas externas examinaron si los préstamos se realizaron de acuerdo con los estàndares de aseguramiento del tramitador del préstamo y si la documentación del préstamo cumplía con las leyes federales y estatales aplicables. Las empresas externas también realizaron las revisiones de valores para garantizar que las propiedades que servían como colaterales de los préstamos hubiesen sido correctamente tasadas.

Los inversionistas de RMBS no pudieron evaluar completamente el riesgo de pérdida de los incumplimientos de los prestatarios porque no tenían acceso directo a los datos subyacentes de los préstamos. JPMorgan sabía esto y les promocionó su supuestamente estricto proceso de diligencia debida a los inversionistas de RMBS potenciales.

Como parte del acuerdo de liquidación, JPMorgan admitió que las empresas externas de diligencia debida le informaron a JPMorgan que varios préstamos en las muestras al azar de préstamos hipotecarios estaban violando las guías de aseguramiento sin factores de compensación para justificar los préstamos. A pesar de esta información, JPMorgan liberó muchos de los préstamos en incumplimiento a los grupos de titulación que compró y luego los vendió a los inversionistas. De acuerdo con un informe de prueba de una de las empresas externas de diligencia debida, el 27 por ciento de los préstamos de la muestra que revisó la empresa en 2006 y a principios de 2007 recibió la clasificación de préstamos hipotecarios en incumplimiento o “rechazados”. JPMorgan luego liberó la mitad de esos préstamos a los grupos que se vendieron a los inversionistas. Aunque la diligencia debida en las muestras al azar indicó que los grupos de titulación muy posiblemente contenían muchos màs préstamos con violaciones de aseguramiento, JPMorgan no identificó ni eliminó esos préstamos del grupo. Por lo tanto, tal y como lo admite JPMorgan en el acuerdo de liquidación, no les reveló a los inversionistas que los RMBS incluían préstamos hipotecarios que no cumplían con las guías de aseguramiento aplicables. El banco también admitió en el acuerdo de liquidación que no reveló que tenía una pràctica establecida de admitir préstamos en el grupo para los que los valores de la propiedad en garantía determinados en el proceso de diligencia debida diferían de la tasación del tramitador en hasta un 15 por ciento, incluso cuando el índice préstamo-valor era tan alta como 100 por ciento.

JPMorgan también admitió que en una ocasión un empleado de JPMorgan, quien participó en la adquisición de grupos de préstamos, les advirtió a sus supervisores que los grupos contenían préstamos hipotecarios de baja calidad que no deberían comprarse ni titularse. A pesar de la advertencia, JPMorgan compró el grupo y tituló muchos de los préstamos.

Entre otros asuntos civiles resueltos como parte del acuerdo de liquidación anunciado hoy se incluyen las reclamaciones relacionadas con la titulación y venta de valores respaldados por hipotecas por parte de Bear Stearns y Washington Mutual entre 2005 y 2007. Ademàs de las reclamaciones del Departamento de Justicia de los EE.UU., el acuerdo de liquidación resuelve las demandas que presentaron la FHFA, NCUA y el procurador general de Nueva York, y las posibles reclamaciones de la FDIC, el procurador general de California y los procuradores generales de los estados de Illinois, Massachusetts y Delaware. La parte de la FHFA del acuerdo de liquidación se anunció previamente. El acuerdo de liquidación solo libera las reclamaciones civiles monetarias en contra de JPMorgan y las corporaciones afiliadas. No libera ninguna posible responsabilidad penal ni a ningún individuo de demandas civiles ni penales.  JPMorgan ha acordado cooperar con el Departamento de Justicia en la investigación actual de esta conducta.

“Los abusos en la industria de valores respaldados por hipotecas favorecieron el deterioro de los estàndares de aseguramiento entre muchos prestamistas hipotecarios, y alimentó la crisis financiera”, dijo el procurador federal Wagner. “Los efectos fueron sorprendentes. JPMorgan vendió màs de $25 mil millones en certificados de RMBS con tasa no preferencial respaldados por préstamos tóxicos. Las cooperativas de crédito, los bancos comerciales y muchos inversionistas en el país fueron víctimas, incluyendo algunos en el Distrito Este de California, y sufrieron pérdidas por miles de millones de dólares. Esta oficina, que sirve a un distrito que fue saqueado por la crisis financiera, tuvo una función importante en que se hiciera justicia en este caso. Quiero agradecer particularmente a Rich Elias, Colleen Kennedy y Kelli Taylor de esta oficina por su extraordinario trabajo en este caso”.

Michael P. Stephens, inspector general interino de la FHFA declaró: "JP Morgan y los bancos que compró, Bear Stearns y Washington Mutual, vendieron miles de millones de dólares de hipotecas defectuosas en los mercados de valores, lo que ayudó a precipitar la crisis financiera. Los inversionistas, incluyendo Fannie Mae y Freddie Mac, sufrieron pérdidas enormes al comprar RMBS de JPMorgan, Washington Mutual y Bear Stearns sin saber sobre esos defectos. El acuerdo de liquidación de hoy es significativo, pero no es de ninguna manera la última medida que tomaran la FHFA-OIG y sus asociados en el cumplimiento de la ley para que los responsables de los actos de fraude y engaño rindan cuentas. Estamos orgullosos de haber trabajado en este caso con el procurador general de los EE.UU. Benjamin Wagner y los abogados de su oficina en el Distrito Este de California y esperamos continuar trabajando juntos".

La investigación del Distrito Este de California fue realizada por los procuradores auxiliares de los EE.UU. Richard M. Elias y Colleen M. Kennedy, junto con Kelli L. Taylor, Jefe de la Unidad Ejecución Civil Afirmativa, y bajo la supervisión de David Shelledy, Jefe de la División Civil, con la asistencia de los agentes especiales de la FHFA OIG, en conjunto con el Grupo de Trabajo de Valores Respaldados por Hipotecas Residenciales, un componente de la Unidad de Ejecución contra el Fraude Financiero.

La unidad de ejecución la creó el presidente Obama en el 2009 para luchar con mano dura, coordinada y proactiva e investigar y procesar los delitos financieros. Con màs de 20 agencias federales, 94 oficinas de procuradores generales de los EE.UU. y socios estatales y locales, es la màs amplia colaboración de agencias de ejecución legal, investigación y regulación que se haya ensamblado nunca para combatir el fraude. Para obtener màs información sobre la unidad de ejecución, por favor visite:

www.StopFraud.gov.

Actualizado 20 de mayo de 2015