“No sabía qué hacer cuando me agarró, pero sabía que estaba mal hecho. Estoy tan aliviada de que . . . [el DOJ] le ha puesto fin a que le haga esto a cualquier mujer en el futuro”. S.E.
“Sé que han estado trabajando en este caso durante mucho tiempo, encontrando muchas mujeres a las que él le hizo daño, y esto significa tanto para mí porque son ustedes los únicos que creen en . . . mi . . .” E.R.
“Saber que no puede hacer lo que me hizo a otras mujeres es un gran alivio. Desearía haber dicho algo antes. Gracias por detenerlo”. P.W.
“Él es un hombre malo que se aprovecha de madres solteras vulnerables y debido a ustedes y a su caso ya no lo puede hacer”. S.H.
“Mi experiencia [con mi arrendador] fue humillante y me hizo sentir repugnante, y me he sentido secretamente atormentada por años. Estaba muy avergonzada de hablar con Alguien acerca de esto. Pero luego el [DOJ] vino y me hizo entender que no fue mi culpa y me informó que yo no era la única víctima de este hombre. Hablar de mis experiencias me ha ayudado a comenzar a sanar. El solo hecho de saber que no podrá hacerle esto a otra mujer de nuevo me hace sentir aliviada. . . . Finalmente estoy progresando emocionalmente. ¡Gracias desde el fondo de mi corazón!”
“Muchas gracias por su árduo trabajo, largas horas y la pasión que ponen en proporcionar justicia para las personas y las familias con casos como éste. Debido a su árduo trabajo y diligencia, nuestro mundo es un lugar mejor y otros pueden vivir libremente, viviendo sus sueños sin estar en peligro. En pocas palabras, son increíbles! “
“No hablé cuando fui atacada hace muchos años. Estoy agradecida de haber tenido la oportunidad de poder hablar ahora”.